Ya se hablaba menos del temporal de nieve y las temperaturas daban tregua a los cuerpos ateridos de frío. Se multiplicaban las críticas a la gestión del alcalde en el manejo de la situación-aunque muchos milagros tampoco se podrían haber hecho. Lo que seguía destacando era la buena voluntad y caridad de personas anónimas, gentes de buen corazón y pocos recursos que ayudaron en todo lo posible a los más necesitados.
Hace cien años en Madrid...
La nieve y la limpieza
"Cinco días hace que los carros de la limpieza no pasan por la calle en que habito; y «lo que te rondaré», como dice mi vecino del cuarto bajo, que, aunque respeta mucho la ciencia y la experiencia de los señores tenientes de alcalde, confía poco en la eficacia de las medidas que adopten para la limpieza de las vías públicas."
Así comenzaba La Correspondencia de España - Sección: Información de Madrid, su artículo sobre la ineficaz actuación del Ayuntamiento en lo concerniente a la recogida de basuras durante los días de nieve.
El periódico denunciaba, o como decían ellos, "preguntaba", sobre qué hacer con las basuras acumuladas en las casas ante la falta de recogida por parte de los empleados de limpieza municipales.
"...en mi humilde hogar no puede permanecer ni una hora más, pues no hay rincón ni agujero donde encerrarlo, y su hedor nos daña la salud, y su vista nos pone en puntillas el estómago.
A la calle no me atrevo a echarlo por no estorbar el paso a los transeúntes ni causar molestias a los vecinos; y también—¿por qué no confesarlo?—porque al Ayuntamiento, que no ha tenido quien limpie las calles, ni carros que recojan las basuras de las casas y de las vías públicas, no le faltaría un guardia municipal que me soltase un buen multazo..."
Cien años después-y no por las nevadas-, a veces nos encontramos con indecorosos y apestosos montones de basura producto de las huelgas de empleados de limpieza, que dicen unos, o de la inepta gestión del Ayuntamiento y sus turbios negocios, que dicen otros... o ambas cosas. Lo cierto es que, mejorando lo presente, nos quedamos con las incomodidades de aquella nevada.
Dando de comer a los pobres en "Las Américas"
En el Especial "De tapón del Rastro a plaza de Nicolás Salmerón" hicimos referencia al conocido "Centro de Compra y Venta Las Américas". Allí encontrarás fotografías del aspecto que tenía.
"Las Américas" se dividía en tres grandes bazares: de "La Casiana", del "Médico" y del "Federal". Tres grandes estados dentro de aquel continente cochambroso cuyos habitantes, los chamarileros, no habían visto un alma desde el comienzo de la nevada.
El domingo, que era el día de mayor animación en aquellos corralones, no se había hecho una sola venta. Los industriales de lo antiguo y los "soguillas" que vivían de traer y llevar trastos viejos, estaban desesperados.
La situación empeoró el lunes y se hizo insostenible. Los "soguillas" acusaban los efectos de tres días de ayuno y frío, presentándose en "La Casiana" casi desfallecidos.
Los traperos y chamarileros de "Las Américas", hombres recios pero de buen corazón, se organizaron y consiguieron reunir ocho pesetas con las que consiguieron dar de comer a los veintidós mozos que estaban acurrucados en la puerta del corralón.
Con aquellas ocho pesetas, los chamarileros de "La Casiana" compraron cinco asaduras de cordero, a cuarenta céntimos cada una; ocho kilos de patatas, un litro de aceite, dos reales de especias, una frasca de vino, el pan necesario y jabón para el fregadero de platos subsiguiente al banquete.
Por suscripción abierta entre los comerciantes del bazar de "La Casiana", a la que contribuyeron tres o cuatro del Rastro y un desconocido que donó un duro, reunieron 199 pesetas con 50 céntimos para dar de comer toda la semana a los necesitados.
El martes asistieron 75 personas a comer en el improvisado comedor que con unas puertas desvencijadas por mesa, se constituyó en "La Casiana". Se les alimentó con 12 kilos de judías y 12 de pan.
El miércoles la asistencia de comensales había ascendido a 175 personas, y en el día de la fecha eran 402 hambrientos los sentados a la mesa.
Hasta entonces llevaban gastadas 150 pesetas. "-¡Que barata es la caridad con un poco de buena voluntad!, comentó el periodista autor de esta noticia aparecida en el Heraldo de Madrid.
El fotógrafo Alfonso estuvo presente en ese banquete escaso de lujos, pero lleno de buenas intenciones, y esto es lo que retrató para el recuerdo de los madrileños de hoy... que hemos tenido muy mala memoria.
Una versión mejorada de la foto anterior, aparecida en Mundo Gráfico del 29 de enero de 1913
Noticias sobre el palacio Xifré
El Heraldo de Madrid protesta este día por la intención de derribar el bellísimo palacio Xifré del Paseo del Prado. El ornato de Madrid así lo demandaba. Decía la noticia:
"Al comunicar esta noticia a los lectores protestamos, en nombre del arte arquitectónico y del gusto artístico, contra la disposición que va a entregar en breve a la piqueta uno de los monumentos más bellos de Madrid."
El palacio Xifré estaba ubicado en el Paseo del Prado, entre las calles de Huertas y Lope de Vega, frente al Museo del Prado. Exponente de la arquitectura neoárabe madrileña, fue mandado construir entre 1858 y 1862 por el financiero José Xifré Downing siguiendo la corriente orientalista derivada del romanticismo, muy de moda entre las clases altas de la época.
Aunque ya se hablaba de su demolición este día de hace cien años, no será derribado hasta 1949 y vendido el solar a la Delegación Nacional de Sindicatos, que erigió allí su sede; actualmente Ministerio de Sanidad y Consumo.
En el importante legado que el fotógrafo J. Laurent dejó a Madrid, se encuentra una serie de fotografías del palacio. Las aquí publicadas corresponden a las pertenecientes a la Fototeca del Patrimonio Histórico - MECD - Archivo Ruiz Vernacci. Cada fotografía contiene su número de inventario.
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Hace cien años en Madrid...
La nieve y la limpieza
"Cinco días hace que los carros de la limpieza no pasan por la calle en que habito; y «lo que te rondaré», como dice mi vecino del cuarto bajo, que, aunque respeta mucho la ciencia y la experiencia de los señores tenientes de alcalde, confía poco en la eficacia de las medidas que adopten para la limpieza de las vías públicas."
Así comenzaba La Correspondencia de España - Sección: Información de Madrid, su artículo sobre la ineficaz actuación del Ayuntamiento en lo concerniente a la recogida de basuras durante los días de nieve.
El periódico denunciaba, o como decían ellos, "preguntaba", sobre qué hacer con las basuras acumuladas en las casas ante la falta de recogida por parte de los empleados de limpieza municipales.
"...en mi humilde hogar no puede permanecer ni una hora más, pues no hay rincón ni agujero donde encerrarlo, y su hedor nos daña la salud, y su vista nos pone en puntillas el estómago.
A la calle no me atrevo a echarlo por no estorbar el paso a los transeúntes ni causar molestias a los vecinos; y también—¿por qué no confesarlo?—porque al Ayuntamiento, que no ha tenido quien limpie las calles, ni carros que recojan las basuras de las casas y de las vías públicas, no le faltaría un guardia municipal que me soltase un buen multazo..."
Cien años después-y no por las nevadas-, a veces nos encontramos con indecorosos y apestosos montones de basura producto de las huelgas de empleados de limpieza, que dicen unos, o de la inepta gestión del Ayuntamiento y sus turbios negocios, que dicen otros... o ambas cosas. Lo cierto es que, mejorando lo presente, nos quedamos con las incomodidades de aquella nevada.
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Dando de comer a los pobres en "Las Américas"
En el Especial "De tapón del Rastro a plaza de Nicolás Salmerón" hicimos referencia al conocido "Centro de Compra y Venta Las Américas". Allí encontrarás fotografías del aspecto que tenía.
"Las Américas" se dividía en tres grandes bazares: de "La Casiana", del "Médico" y del "Federal". Tres grandes estados dentro de aquel continente cochambroso cuyos habitantes, los chamarileros, no habían visto un alma desde el comienzo de la nevada.
El domingo, que era el día de mayor animación en aquellos corralones, no se había hecho una sola venta. Los industriales de lo antiguo y los "soguillas" que vivían de traer y llevar trastos viejos, estaban desesperados.
La situación empeoró el lunes y se hizo insostenible. Los "soguillas" acusaban los efectos de tres días de ayuno y frío, presentándose en "La Casiana" casi desfallecidos.
Los traperos y chamarileros de "Las Américas", hombres recios pero de buen corazón, se organizaron y consiguieron reunir ocho pesetas con las que consiguieron dar de comer a los veintidós mozos que estaban acurrucados en la puerta del corralón.
Con aquellas ocho pesetas, los chamarileros de "La Casiana" compraron cinco asaduras de cordero, a cuarenta céntimos cada una; ocho kilos de patatas, un litro de aceite, dos reales de especias, una frasca de vino, el pan necesario y jabón para el fregadero de platos subsiguiente al banquete.
Por suscripción abierta entre los comerciantes del bazar de "La Casiana", a la que contribuyeron tres o cuatro del Rastro y un desconocido que donó un duro, reunieron 199 pesetas con 50 céntimos para dar de comer toda la semana a los necesitados.
El martes asistieron 75 personas a comer en el improvisado comedor que con unas puertas desvencijadas por mesa, se constituyó en "La Casiana". Se les alimentó con 12 kilos de judías y 12 de pan.
El miércoles la asistencia de comensales había ascendido a 175 personas, y en el día de la fecha eran 402 hambrientos los sentados a la mesa.
Hasta entonces llevaban gastadas 150 pesetas. "-¡Que barata es la caridad con un poco de buena voluntad!, comentó el periodista autor de esta noticia aparecida en el Heraldo de Madrid.
El fotógrafo Alfonso estuvo presente en ese banquete escaso de lujos, pero lleno de buenas intenciones, y esto es lo que retrató para el recuerdo de los madrileños de hoy... que hemos tenido muy mala memoria.
Una versión mejorada de la foto anterior, aparecida en Mundo Gráfico del 29 de enero de 1913
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Noticias sobre el palacio Xifré
El Heraldo de Madrid protesta este día por la intención de derribar el bellísimo palacio Xifré del Paseo del Prado. El ornato de Madrid así lo demandaba. Decía la noticia:
"Al comunicar esta noticia a los lectores protestamos, en nombre del arte arquitectónico y del gusto artístico, contra la disposición que va a entregar en breve a la piqueta uno de los monumentos más bellos de Madrid."
El palacio Xifré estaba ubicado en el Paseo del Prado, entre las calles de Huertas y Lope de Vega, frente al Museo del Prado. Exponente de la arquitectura neoárabe madrileña, fue mandado construir entre 1858 y 1862 por el financiero José Xifré Downing siguiendo la corriente orientalista derivada del romanticismo, muy de moda entre las clases altas de la época.
Aunque ya se hablaba de su demolición este día de hace cien años, no será derribado hasta 1949 y vendido el solar a la Delegación Nacional de Sindicatos, que erigió allí su sede; actualmente Ministerio de Sanidad y Consumo.
En el importante legado que el fotógrafo J. Laurent dejó a Madrid, se encuentra una serie de fotografías del palacio. Las aquí publicadas corresponden a las pertenecientes a la Fototeca del Patrimonio Histórico - MECD - Archivo Ruiz Vernacci. Cada fotografía contiene su número de inventario.
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Dos fotografías de Alfonso que muestran un bellísimo panorama. Se trata de dos imágenes del Parque de El Retiro después de la nevada del 17 de enero de 1914.Moda elegante
Los afamados modistos parisienses ya pensaban en el buen tiempo y presentaban sus modelitos para la primavera.
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Humor centenario
De la tontería del ser humanoVéase cómo en lo superfluo de un vestido de moda se puede vestir una familia entera |
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Las fotos
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Bibliografía | ||||||
· Citas de noticias de periódicos en la publicación · Citas de fotografías y artículos de revistas y periódicos en la publicación |
© 2014 Eduardo Valero García - HUM 014-010 EFEMERIDES1914
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