miércoles, 13 de octubre de 2021

Un proyecto de limpiabotas, el Gremio de zapateros y los empolvados petimetres. Madrid, siglo XVIII

Muchos son los antiguos oficios y Gremios que han quedado recogidos en el callejero madrileño e identificadas sus calles con las preciosas placas realizadas por el ceramista Alfredo Ruiz de Luna González. Bordadores, botoneras, cedaceros, cabestreros, cuchilleros, curtidores, latoneros, tintoreros y yeseros, entre otros, son recuerdo de aquellas industrias artesanales reunidas en Cofradías y Gremios. 
Como indica el título de este trabajo, hablaré de uno de aquellos Gremios: el de los zapateros, oficio aún presente y necesario. 
 
Oeuvre complet d'ADRIAEN van OSTADE (circa 1710)
Lámina 21: El zapatero - Signatura: Invent/42091-Invent/42142
Biblioteca Digital Hispanica - Bilioteca Nacional de España. 
 
El oficio de zapatero, como el de tabernero y carnicero, eran citados por D. Ramón de Mesonero Romanos al referirse a los Manolos en su libro El Antiguo Madrid
«Pero volviendo al tipo especial del Manolo de Madrid, según nos le dejó pintado Goya en sus caprichos, y en sus deliciosos sainetes el picaresco D. Ramón de la Cruz, debemos consignar que ha venido sufriendo constantes y sucesivas modificaciones en sus costumbres, modales y trajes; sus oficios más favoritos continúan siendo, como en el siglo pasado, los de zapatero, tabernero, carnicero, calesero y tratantes en hierro, trapo, papel, sebo y pieles, que constituían, hasta hace pocos años, los gremios de traperos, chisperos, corredores de la cuatropea, y otros;…» [1] 
Es distinto el caso de los “limpia” –es decir, los limpiabotas–, lustrabotas, reyes del charol, del betún o del brillo; profesionales que llegaron a su mayor esplendor en el Madrid de los años 50 del siglo XX y que en las postrimerías del siglo XVIII no formaban parte del escenario urbano de nuestra ciudad. 
 
Otra cosa son los petimetres, figurones cuyo oficio era no tener oficio. De ellos también hablaré, como lo hacía en 1788 el madrileño D. Joseph de Ramos, ideólogo de la presencia de los limpiabotas en la villa y corte. 
 
 

Un proyecto de limpiabotas 

“-¿Le damos un boleo?”, señalando mis zapatos me preguntaba un día el lustrabotas sin plaza fija que deambula por los aledaños de la Plaza Mayor; iba ataviado a la vieja usanza, con su pantalón y camisa de color negro, en su caso, bastante raído. Rara avis, como los pocos que quedan en la Gran Vía con plaza casi fija. 
 
De los más pintorescos del Gremio de betuneros ambulantes madrileños, recordé hace unos años a Julián García y Sánchez, alias “Cienhigos”; actor, literato, comediógrafo y limpiabotas de principios del siglo XX.
 

 
Pero hoy viajo más lejos, tanto como a las postrimerías del siglo XVIII, cuando en el Madrid ilustrado la profesión de limpiabotas era un proyecto. Para ello debemos situarnos en 1788, último año de vida del rey Carlos III y apogeo de una de las sofisticadas tribus urbanas de la villa y corte: los petimetres.
 
José Cadalso, uno de los principales asistentes a las tertulias ilustradas de la Fonda de San Sebastián, escribía en sus Cartas Marruecas, publicadas el 1 de abril de 1789 en el Correo de Madrid (o de los ciegos): 
«Por cada petimetre que se vea mudar de moda siempre que se lo manda su peluquero, habrá cien mil españoles que no han reformado un ápice en su traje antiguo». 
Now Sr your e compleat macaroni : [estampe] : 
Le petit maître partant pour la promenade.
Signatura: Bibliothèque nationale de France, département Arsenal, EST-194 (112)
Bibliothèque nationale de France 
 
El citado Joseph de Ramos toma la palabra ahora para hablarnos de estos petimetres y la necesidad de un gremio de limpiabotas en Madrid. Lo hace a través de las páginas del Diario de Madrid en una carta al director. 
 
 

Carta al director del Diario de Madrid 

El viernes 25 de julio de 1788, bajo el título de «A los Diaristas», se publicaba en el Diario de Madrid la propuesta de este lector que había conocido el oficio de limpiabotas en París y sugería la implantación del gremio en la villa y corte. La carta es curiosa, porque nos ofrece -con bastante buen humor- una visión de la sociedad matritense de entonces, así como del completo servicio que prestaban los limpiabotas franceses. 
 

 
En el texto encontramos expresiones como «a la francesa», «carbulistas a la moda» y la mención de la pintoresca figura del petimetre; además de nombres de cafés, posadas, botillerías y las zonas más importantes donde deberían apostarse los profesionales del lustre. 
 
Joseph de Ramos firma la carta en Madrid con fecha 20 de julio. La dirige a los responsables del periódico con el desaparecido tratamiento de Vuesas mercedes (Vmds.) y el indispensable saludo final: «que su mano besa». 
 
A continuación transcribo el contenido de la misiva, acompañado de imágenes ilustrativas. 
Muy Señores mios: aunque no soy subscriptor, no por eso dexo de tomar y leer diariamente sus periódicos, para lo qual dedico todos los días cierto tiempo; de modo que nunca por leerlos dexo de cumplir con mi obligación. Habrá cosa de año y medio, día más o menos, que lo hago, y he notado que dexaron Vmds. de insertar las anécdotas históricas de España, todos los más de los días ocupa gran parte del Diario alguna carta de proyectistas a la moda (esto es a la francesa,) y viendo que gran número de gentes se dedican a esto, he querido yo también que se me cuente entre el número de los más ínfimos :: (No crean Vmds. que voy a decir de los ignorantes, no Señores, lo tendría a menos) de los idiotas o carbulistas a la moda, digo; pero escusemonos de palabras, y vamos al asunto. Yo deseára se estableciese en Madrid (ya que todo se hace a la francesa) cierto permiso que hay establecido en la Corte de París, les aseguro a Vmds. que será útil para los petimetres de esta Corte. Petimetres llamo yo a todos los que tienen los honorificos empleos, de capataces, o caporales de la tuna (cuyo número en Madrid es excesivo), de paseantes en corte, apuntadores de las esquinas de la puerta del Sol, matriculadores de M:: o P:: visas del Prado, vigías de balcones, jugadores de billar, contadores de coches, asentistas de cafés &c. &c. &c. 
 
Le petit maitre physicien : [estampe] 1784
Signatura: Bibliothèque nationale de France, département Estampes et photographie, FOL-IB-4 (3) Bibliothèque nationale de France 
 
Sin duda estarán Vmds. con el credo en la boca deseando saber que gremio será esce; gremio le llamo yo porque en París está recibido como tal; y se llaman vulgarmente los individuos que le componen Les Decroteurs [Décrotteur] eso es, los limpiadores de zapatos, de los quales se hallan como cosa de 150 (y aunque dixera 200 creo que no mentiría) solamente encima de uno de los puentes de aquella Ciudad, llamado el puente nuevo. Estos tienen todos un banquito pequeño en el qual ponen los petimetres los pies para que les limpien los zapatos; un par de zepillos, uno mas recio que el otro; un cuchillero; unos pocos de trapajos o guiñapos; y un frasquillo con aceite reluciente para el mismo fin; unos guantes de badana; un pedazo de tisa para limpiar las hebillas; una faletilla colgada de un palo con esta inscripción: Fulano de tal, esquilador de perros, capador de gatos, y limpiador de zapatos. 
 
Décrotteur (1760)
Tilliard, Jean-Baptiste , Graveur Saint-Aubin, Augustin de , Dessinateur Basan, Pierre-François , Editeur Saint-Aubin, Augustin de , Marchand d'estampes 
Número de inventario: G. 5109 - G.5110
CC0 Paris Musées / Musée Carnavalet – Histoire de Paris
 
A muchos les parecerá que este gremio no serviría de nada en Madrid, pero se engañan: que es muy útil y trahe muchas ventajas, tanto al Estado, como a los petimetres matritenses: al Estado, porque destinando a esto cierta porción de perezosos o holgazanes, se quitaban otros tantos vagos, y aun se puede decir rateros. A los petimetres, porque habiendo esta casta de pájaros limpiadores, no entraran en las tertulias y visitas con los zapatos llenos de polvo &c. Ahí es nada las ventajas que trahe el dichoso establecimiento, entrar un petimetre en una tertulia limpio de pies a cabeza, no ensuciar las alfombras o esteras, y ponerse a secretear con las damas sin riesgos de ensuciarles el vestido. Me parece que ya estoy oyendo a todos los hombres de forma decir unánimes, ¡qué borrico será el Sr. proyectista! Pero al mismo tiempo me consuela el oír decir a nuestros petimetres afrancesados, ¡Feliz España que has producido tal hombre! Pero vamos al establecimiento de dicho gremio. El número de hombres destinados no a esquilar o trasquilar perros y capar gatos como en París, sino solamente a limpiar zapatos y no deberá pasar de 50 y estos se repartirán en Madrid del modo siguiente: En la puerta del Sol estarán todo el día 18. = En la plazuela del Angel estarán 11 por la mañana y a la tarde irán a la carrera de San Gerónimo entre los Italianos y la botillería de Canosa, por haber en dicho paraje mucho polvo. = En la puerta de la Fontana de oro 6 todo el día. = En la calle de Fuencarral cerca del café de las quatro Naciones 3. = En los Caños del Peral cerca de la Opera 3. En las Platerías 4. Y en la plazuela de Sto. Domingo los quatro restantes. 
 

Vamos ahora a formar el arancel. Por cada par de zapatos dos quartos: por cada par de botas 6; y por cada uno de hebillas 4. Si se establece, verán Vmds. todos los petimetres con los zapatos limpios a poca costa. Basta por ahora, y estimaré publiquen Vmds. esta noticia por ser tan interesante como muchas de las que se publican y si acaso tengo el honor (eso es hablar a la Francesa) de ver mi nombre en sus periódicos de Vmds. les remitiré de quando en quando algunas cosillas; pero verifiquese o no todo lo dicho, siempre será su mas afecto servidor que su mano besa. 
 
La carta resulta muy interesante por los datos que aporta y principalmente por el hecho de que no existía en el Madrid dieciochesco la figura del limpiabotas tal y como la conocemos. Teniendo en cuenta que las modas de París habían llegado a la villa y corte mucho antes que la invasión napoleónica, quizás el proyecto de don Joseph de Ramos llamara la atención de algunos o se tuviera en cuenta para el futuro; porque, si bien Carlos III había ordenado hacer de Madrid una ciudad limpia y decorosa, faltaba mucho para que los transeúntes anduvieran con los zapatos limpios. 
 
Y ya que hablamos de Carlos III, notaréis que la carta está escrita el año del fallecimiento de tan ilustrado monarca madrileño, acontecido el 14 de diciembre de 1788. 
Pues bien, la lista de zapateros que encontraréis en el siguiente título comprende los ubicados en la villa desde 1758 hasta 1759, poco menos de dos años antes de la llegada del rey a Madrid (9 de diciembre de 1759). 
 
 

Los zapateros 

Desde antiguo existían profesionales del calzado en Madrid; estos artesanos se dividían en tres categorías: los maestros zapateros, los de nuevo y los de viejo. No andaban por las calles y habitualmente tenían su negocio en los portales o en su propia casa. 
 
El oficio de zapatero estuvo unido a la industria de la curtiduría y pellejería al menos hasta 1493, año en que el Concejo diferencia la industria del calzado de las otras. En 1546 aparecerán en los Libros de Acuerdos las primeras ordenanzas exclusivamente para zapateros, en las que se incluían las de borceguineros o chapineros. A su vez, se legisló sobre los zapateros de viejo o remendones. [2] 
 
Les métiers : le cordonnier (Entre 1632 y 1633) 
Bosse, Abraham , Graveur Bosse, Abraham , Dessinateur Le Blond, Jean 1er , Editeur 
Número de inventario: G.14043 
CC0 Paris Musées / Musée Carnavalet
 
Otros artesanos como los boteros, pellejeros, guarnicioneros, agujeteros y guanteros estaban incluidos en las ordenanzas para curtidores y zapateros. En 1622 existían 37 Gremios en Madrid, de entre ellos la industria de zapateros y curtidores, zapateros de viejo, boteros y pellejeros. En aquellos tiempos, el Gremio de los zapateros tuvo su portal en la Plaza Mayor. 
 
Estos obreros del calzado son citados o aparecen como personaje protagonista de varios entremeses, bailes y loas del siglo XVII, como el Bayle del Zapatero y el Valiente, de Monteser. También entremeses y sainetes del siglo XVIII en adelante, como los entremeses del Zapatero Sordo; El Zapatero y Don Terencio Catalana; El Zapatero de viejo y el Alcalde de su Lugar; El Hijo del Zapatero y el Estudiante Salmanquino; La baronesa y el zapatero, de Laserna Nieva; Los zapateros y Adonde las dan las toman o Los zapateros Renegado, de Ramón de la Cruz; Tonadilla a 3 del zapatero, de Esteve, entre otros. 
 

 

 
Aunque nos centramos en el siglo XVIII, es interesante conocer cómo eran y cómo trabajaban los zapateros de los inicios del siglo XIX. 
En la lámina número 8 de Los Gritos de Madrid (1809 - 1816) encontramos un vendedor de zapatos viejos y en una lámina de Los Oficios (Siglo XIX) se muestra a un zapatero en su faena. Estos grabados pueden verse en la Biblioteca digital Memoriademadrid
 

 
También la Biblioteca Nacional atesora imágenes de zapateros. Se trata de dibujos originales de Leonardo Alenza, gran retratista de costumbres madrileñas. 
 
Zapatero remendón (Entre 1830 y 1845)
Leonardo Alenza
Signatura: DIB/15/44/445
Biblioteca Digital Hispanica - Bilioteca Nacional de España.

 
Zapatero remendón (1830)
Leonardo Alenza
Signatura: DIB/15/43/283
Biblioteca Digital Hispanica - Bilioteca Nacional de España.

Zapatero de viejo (1830)
Leonardo Alenza
Signatura: DIB/15/41/110
Biblioteca Digital Hispanica - Bilioteca Nacional de España.
 
 

Agunos zapateros de la villa y corte

Del Diario noticioso, curioso, erudito y comercial, público y económico, rescato de sus anuncios y reclamos los nombres y/o ubicación de algunos zapateros madrileños del siglo XVIII. Sólo es una muestra en la que se citan los anunciados durante los años 1758 y 1759. 
 
  • Calle de Hortaleza, esquina a la del Caballero de Gracia, primera puerta, entre la Cerería y Zapatero. 
  • Calle de los Tudescos, entrando por la Plazuela de Santo Domingo, a mano izquierda, pasada la Carbonería y al lado de un Zapatero. 
  • Zapatero de viejo, que hay en un portal, frente al Hospital de la Pasión. // En la calle de Atocha, frente del Hospital de la Pasión, en casa de un Zapatero. // El Zapatero de Viejo que acostumbra trabajar en un portal que está en la calle de Atocha, frente del Hospital de las mujeres… // … calle de Atocha, la casa que está frente del Arco del Hospital, quarto baxo, que en el portal hay un Zapatero de Viejo. 
  • En la calle Mayor, casa de Antonio Rentero, Maestro de Zapatero. - En la Plazuela de Herradores, entre una Confitería y un Zapatero. // Plazuela de Herradores, en el quarto tercero de la casa en cuyo portal hay un Zapatero y un Dorador. 
  • En la calle Mayor, frente del Portal de San Isidro, entre una Barbería y un Zapatero (Posiblemente se esté refiriendo al maestro zapatero Antonio Rentero). 
  • En la calle Mayor, en la Tienda de Pablo Fuentes, Zapatero - Raphael Paril, Maestro Zapatero, que vive en la calle Mayor, junto a la Pastelería. 
  • Enfrente de las Monjas de Constantinopla, en el quarto segundo, que está encima del Oficio de un Escribano del Número, y en cuyo portal de la casa hay un Zapatero de Viejo… // En la calle Mayor, frente de las Monjas de Constantinopla, entre un zapatero, y la Confitería… 
  • En la calle del Carmen, entre el Peluquero y el Zapatero. 
  • En la calle del Desengaño, entrando por la de Fuencarral, pasado el Zapatero. 
  • En la calle del Príncipe, entrando por el Quartel, sobre mano derecha, pasada la Hostería, y un Zapatero 
  • Melchor Ortiz, Maestro Zapatero de Viejo, que asiste en el portal de Mr. Arneau, Posada de Cavalleros, calle del Carmen. 
  • Zapatero de Viejo, que asiste en la Cava baxa, en el portal que está frente de la Posada de San Antón. 
  • En la calle de Cavallero de Gracia, frente a la Hostería del Cavallo, en cuyo portal hay un Zapatero de Viejo… 
  • En la plazuela de Navalón, que media a la calle de la Sartén, encima de un Tendero y un Zapatero… // Plazuela de la Sartén, en medio de un Guarnicionero y un Zapatero… 
  • Tienda de Zapatero, que está junto a la Iglesia de nuestra Señora de Loreto… 
  • Frente de la Fuente de la Puerta del Sol, quarto principal, sobre un Platero, que hay un Zapatero de Viejo en el portal. (Por otro anuncio sabemos que se llamaba Juan López) 
  • El Zapatero de Viejo, que asiste junto al Concejo… 
  • Juan Antonio Diaz, Zapatero de Viejo, que vive baxo el Oratorio de la Magdalena… // Calle del Calvario, esquina a la de Ministriles, en casa de Juan Antonio Diaz, Zapatero de Viejo. 
  • Plazuela del Angel, a la Posada que llaman de la Vizcaína, que el Zapatero de Viejo que está en el portal dará razón. 
  • El Zapatero de Viejo que asiste en la calle de Fuencarral, junto a la Confitería que hace frente al Convento de las RR. PP. Agonizantes… 
  • Zapatero que está inmediato a la Capilla de Nra. Sra. de la Barquera, calle de Jacometrenzo. // En la calle de Jacometrenzo, donde está la Botillería, esquina de la calle de la Salud (…) el Zapatero que está en el portal… // Calle de Jacometrenzo, en la Casa de los Linages, donde Gines Banas, Maestro Zapatero… // En la calle de Jacometrenzo, entre la de Chinchilla, y la del Olivo, se alquila una Tienda en 3 pesos al mes, dará razón el Zapatero, que está junto a ella… // … calle de Jacometrenzo, casa de un Zapatero, que está frente del Hospital de los Franceses. 
  • El Zapatero de Viejo, que trabaja junto a la puerta de la Villa… 
  • En la calle de la Montera, frente de la calle Angosta, entre una Lonja, y una Ropería, dará razón el Zapatero de Viejo, que está en el portal… // Calle de la Montera, entrando por la Puerta del Sol, a mano derecha, en un quarto principal que está entre un Zapatero y el Tapicero… 
  • En la calle del Pez, casa que hace esquina a la calle de los Hyeseros, entre una Tienda de Mercería, y un Zapatero, frente de la Taberna… 
  • … pasado Antón Martín, la primera casa que hace esquina, en cuyo portal hay un Zapatero de Viejo. 
  • … frente de San Antonio de los Portugueses, en casa de un Maestro Zapatero. 
  • En la calle de San Onofre, en el quarto principal que cae sobre la Tienda del Zapatero… 
  • En la calle de las Infantas, frente a la casa del marqués de Villa-Castél, el Zapatero que está en el portal… 
  • En la calle de la Cruz del Espíritu Santo, frente al Señor Conde de los Cobos, en el quarto principal, sobre un Zapatero… 
  • En la calle de la Abada, frente del Molino de Chocolate, entre un Peluquero, y un Zapatero… 
  • En la Carrera de San Geronymo, frente a la Tienda de un Platero, en la casa donde hay un Dorador en el quarto baxo, y un Zapatero en el zagüan… // 
  • El Zapatero que está en el portal, frente de la Fontana de Oro, en la Carrera de San Geronymo… // … el Zapatero de Viejo, que está en un portal, frente a la Botica de Bote, que está en la Carrera de San Geronymo. 
  • … casa inmediata a la Jabonería que hay subiendo a Santa Cruz, en cuyo portal hay un Zapatero de Viejo… 
  • … Vidrería que está frente de Porta-Coeli, al quarto principal, en cuyo portal hay un Zapatero de Nuevo. 
  • En la calle del Olmo, mas abaxo de donde vive la Señora Marquesa de Villaminaya, en la casa de un Escultor, en el patio, en cuyo portal hay un Zapatero… 
  • En la baxada de Santa Cruz, casa de la Soledad, inmediata a la Lonja de Pozuelo, (…) el Zapatero que está en el portal… 
  • … calle de la Paz, en el portal donde hay un Zapatero de Viejo, frente del juego de Trucos. 
  • En la calle de Toledo, casa de Ramón Cathalan, Maestro Zapatero, que vive junto a la Portería del Convento de las Señoras Religiosas Franciscanas… 
  • En la calle de la Ruda, entrando por la Plazuela de la Cevada, a mano derecha, en el portal que hay un Zapatero de Viejo… 
  • En la calle de la Ballesta, y la casa que hace esquina a la de la Luna, en el portal hay un Zapatero de Viejo… (Otro anuncio indica que se trata de un “portal grande”) 
  • En el quarto principal de la calle de San Onofre, que hace esquina a la de Valverde, y debaxo hay un Zapatero de Nuevo… 
  • … en la calle de Leganitos, frente al Colegio de Músicos del Rey, nuestro Señor (que Dios prospere), donde hay un Zapatero de Nuevo. // El Maestro Zapatero que vive en la calle de Leganitos, frente a Mathias de Ávila… 
  • … calle de la Abada, casa de un Dorador que vive frente de Retamar, entre un Zapatero de Nuevo y otro de Viejo. 
  • El Zapatero de Viejo, que vive o está frente de la Bobeda de San Ginés… 
  • … quarto principal donde vive la Lavandera de la Reina nuestra Señora (que está en el Cielo), calle de la Concepción Geronyma, frente de la Cantarilla, encima de la Tienda de un Zapatero de Nuevo. 
  • … casa de la Parra, que está en la calle de las Fuentes, en que hay un Zapatero de Viejo… // Antonio Rosales, Maestro Zapatero, que vive en la casa de las Animas, calle de las Fuentes, frente de un Guarnicionero. 
  • El Zapatero de Viejo, que trabaja en el portal que está junto a la Taberna de la calle Zedaceros… // … el Zapatero que está junto a la Taberna de la calle Zedaceros, entrando por la de Alcalá a mano derecha. 
  • … calle de la Magdalena, en casa de un Maestro Zapatero, llamado Montaves. 
  • … en la calle de las Carretas, junto a la Librería donde se vende el Mercurio, encima de un Zapatero, y un Guarnicionero… 
  • El Zapatero de Viejo, que está en la calle de los Preciados, junto a la Jabonería… 
  • … calle de Alcalá, frente del Buen Suceso, donde hay un Zapatero de Viejo a la puerta. (Otro anuncio hace referencia a que ese portal era de la casa de D. Lucas Cavallier) 
  • … calle de Bordadores, en el patio segundo de la casa que está en la Plazuela, y en cuyo portal hay un Zapatero. 
  • … el Zapatero de Viejo que está en un portal junto al Convento de nuestra señora de los Angeles.
  • … el Zapatero de Viejo, que está en la calle del Humilladero, entrando por la puerta de Moros a mano derecha, en un portal que está frente de una Tienda. 
  • … el Zapatero de Viejo que está en la calle de la Inquisición, frente de la casa del Excelentísimo Señor Conde de Aguilar… 
  • … Red de San Luis, frente del Mesón de la Gallega, en una Lonja cerrada, quarto principal, que en el portal hay un Zapatero de Viejo. // Red de San Luis, casa de Don Miguel de Barnachea, que cae encima del Zapatero, que tiene puerta de hierro… 
  • Cava baxa, frente a la Posada de San Joseph, a la casa en cuyo portal esta entre un Zapatero, y una Barbería… 
  • Zapatero de Viejo, que está más abaxo de la Puerta del Sol, frente de los maderos de la obra de los Correos.
Para que no resulte muy brusco el cambio de zapatero a petimetre, recordemos al compositor Pablo Esteve, autor de Tonadillas como las tituladas El zapatero, su mujer y petrimetre y La dama, y el zapatero petimetre. Y más música puso a Tonadillas dedicadas a petimetres, como El cuento de la petimetra; El petimetre afectado y maja de Rechupetazo; El marido cicatero y la petimetra de moda; Tonadilla a Duo La Pretendiente de Comica y un petimetre en la corte; La burla del petimetre en el mesón; Un petimetre, una maja y un tostonero; La Bellotera y dos petimetres… 
 
 

Los petimetres 

«Llamar a un pisaverde, Pisaverde, 
No hay mujer que de tal nombre se acuerde; 
Petimetre es mejor y más usado, 
O por lo menos más afrancesado». 
José Francisco de Isla (hacia 1746) 
 
 
Petit Maître Aérostatique allant en Campagne : [estampe] 1770-1870 
Signatura: Bibliothèque nationale de France, département Estampes et photographie,
 RESERVE QB-370 (6)-FT 4 
Bibliothèque nationale de France. 
 
La opinión que Joseph tiene de ellos no es exagerada; aquella tribu de lechuguinos, pisaverdes, gomosos y currutacos afrancesados no tenía más oficio que el de cuidar su apariencia en exceso atendiendo a la última moda de Francia, simular ser aristócratas y eruditos exagerando sus maneras y lenguaje, y dedicando su tiempo al galanteo. 
 
José Francisco de Isla, en su obra Triunfo del amor y de la lealtad : dia grande de Navarra en la festiva ... aclamacion del Serenissimo catholico rey don Fernando II de Navarra y VI de Castilla egecutada en la Real Imperial Corte de Pamplona ... por su Ilustrissima Diputacion, en el dia 21 de Agosto de 1746, añade una expresión al referirse al petimetre; le llama: “almidonado, y a la chambery”. 
 
Y Don Ramón de la Cruz dice de ellos en el sainete El petimetre al referirse al buen gusto: 
 
Yo os lo diré: una fantasma 
que como a los racionales 
entes les anima el alma, 
a los entes petimetres 
anima invisible para 
que se esfuercen a salir 
de las jerarquías bajas 
de su especie, hasta ocupar 
la sublime, y se señalan 
estos felices sujetos 
ya en la hechura de las cajas 
que llevan, ya en los relojes, 
ya en la conducción gallarda 
del aire, de la figura, 
ya en la guarnición extraña 
y colores del vestido; 
y finalmente, en la gracia 
inconcusa con que se hacen 
preferir de las muchachas. 
 
Petimetres los había de ambos sexos y todos ellos recibían críticas por igual, como las vertidas en el Diario Curioso, Histórico, Erudito, etc., del 10 de enero de 1773, bajo el título «Discurso de los Petimetres»: 
Los Petimetres, son en todas partes el azote de la sociedad, y la especie mas ridícula que anda con orgullo sobre la tierra. Esta enfermedad de ser Petimetres, se ha comunicado a toda la juventud, y cada estado tiene los suyos, pero la Nobleza se distingue de todos los otros, da originales a la Corte, a las Ciudades, y aun a las Villas. 
Un Petimetre, es un animal diferente del resto de los hombres; se precia de pensar al revés de los otros, de vestir, de hablar, de andar, de toser, y de escupir de un modo contrario al de todos los demás : Los de la Corte, son los modelos de que se forman los de las Ciudades, y estos los exemplares de las Villas : Son unas gentes, que desde la mañana hasta la noche, se ocupan en componerse, que estudian en inventar nuevos gustos, que siempre están en movimiento, ya diciendo coplas entre dientes, ya bailando, o cantando; después se sientan de repente, para sacar una caxa de nuevo gusto, o para contar los favores que han merecido a las Damas. Este es el carácter de los Petimetres, a qual ha de ser mas tonto, y cada uno se sale con ello, a su modo; de suerte que los que se distinguen mas, tienen derecho a dar licencia a los otros. […] 
 
Le petit-maître coquet revenant de Gibraltar 
Bibliothèque nationale de France, département Estampes et photographie, 
RESERVE QB-201 (113)-FOL 
Bibliothèque nationale de France 
Es simpleza el creer que las casadas se ocupan en el gobierno de su casa, y en la educación de sus hijos : bueno : ese es su menor cuidado. Para ser de moda, es menester que una Dama no piense desde la mañana, hasta la noche, sino en jugar, en visitar, o en que la visiten; en responder a los billetes galantes, y en tener alrededor de si una tropa, ociosa, con el nombre de Adoradores, para entretenerla, mientras está en el tocador. Esto se llama vivir como Muger de calidad, porque el querer agradar al Marido, mirar por la casa, y por la crianza de los hijos, es de gente ordinaria. 
Hay tal simpatía entre los originales de uno, y de otro sexo, que para agradar a las Petimetras, es menester ser Petimetre, aunque nunca lo sea : y si las Mugeres de juicio gustan del hombre prudente, discreto, y modesto; las Petimetras solo se prendan de locos, de necios, desatinados, y figurones, y esto basta para que se enamoren de ellos. 
 
Le petit maître et la dame en l'air 
Bibliothèque nationale de France, département Estampes et photographie, 
FOL-IB-4 (4) 
Bibliothèque nationale de France 
Que tropel de reflexiones se me ofrecía aquí sobre la Petimetria! De buena gana las comunicaria al Publico, si pudiese así desterrar tal locura, pero por mas que diga, no remediaré nada, y así vaya solamente este ROMANCE:
 
 
 
Después de las palabras leídas sobre la figura de los petimetres, nos queda por conocer la definición de un diccionario Español-Francés del siglo XVIII. En el Nouveau dictionnaire espagnol et françois, françois et espagnol: avec l'interprétation latine de chaque mot, de Claude Marie Gattel, publicado en 1790, encontramos varias acepciones: 
 
«Pere-Maître. El padre maestro de los novicios. Δ Petit-maître. Petimetre: pisaverde, caballerete.»
«Petit-Maître. Petimetre; el joven que cuida demasiadamente de su compostura.» 
«Plumet, s. m. Plumage; el penacho de plumas que se pone por adorno en los sombreros Δ Galancete; pisaverde; petimetre Δ Ganapan que en los puertos de la ciudad de París lleva en la cabeza los sacos de carbón.» 
 
 
Desde el antiguo Gremio de zapateros hasta el proyecto de limpiabotas, pasando por la “Petimetría”, llegamos al final de este trabajo en el que no han faltado preciosas imágenes del pasado; costumbres de la sociedad de entonces; nombres de algunos zapateros y los lugares donde ejercían su profesión. 
 
En cuanto a los limpiabotas debemos esperar hasta el siglo XIX, que es cuando comienzan a formar parte de la urbe matritense. Eso lo veréis en el siguiente artículo que ahora se encuentra en proceso de investigación. Mientras tanto, recrearos con esta bonita estampa de una decimonónica “boutique de décrotteur”. 
 
"TABLEAUX DE PARIS. / Aux Arts réunies, Passage Panorama, Boutique de Décroteur, Madame au Bureau, Garçons / Elégans, Abées, Militaires, les Journeaux" (Entre 1814 y 1831) 
Opiz ou Opitz, George Emmanuel, dessinateur 
Número de inventario: D.8569 
CC0 Paris Musées / Musée Carnavalet – Histoire de Paris





Bibliografía y Cibergrafía

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[1] MESONERO ROMANOS, Ramón. El Antiguo Madrid, paseo Histórico-anecdótico... Madrid, 1861, pág. 194

[2] MENDO CARMONA, Concepción. La industria del cuero en la Villa y tierra de Madrid a finales de la Edad Media. Espacio, Tiempo y Forma. Serie III, H.^ Medieval, t. 3, 1990, págs. 181-211.
 
 
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© 2021 Eduardo Valero García - HUM 021-006 OFICIOS
Historia Urbana de Madrid
ISSN 2444-1325



jueves, 9 de septiembre de 2021

La Droguería Romero Girón de la calle Augusto Figueroa. Madrid, siglo XX

Hoy desaparecida, la Droguería Romero Girón estuvo ubicada en la calle Augusto Figueroa, 15 (actual 13), tal y como quedó ratificado en el grupo de Facebook Historias Matritenes, de lo que doy cuenta en la actualización del artículo Fototeca: El burro de la trapera. Madrid, hacia 1920 (2015). Esos datos me han llevado -como lo indico en la actualización- a realizar un trabajo de investigación sobre el citado comercio. 

Como veréis a continuación, los datos arrojados en la búsqueda nos ofrecen un universo de resultados; ramificaciones que enriquecen la geografía urbana de nuestra ciudad y suman entidades, identidades, vida, usos y costumbres de la sociedad matritense. 

 

La industria de la famila Romero Girón
Propiedad de la familia Romero Girón y López Pelegrín, dedicados a la industria resinera y bien conocidos por su relación con la política, inaugurarán en 1905 su fábrica de pinturas, barnices, esmaltes, etc., ubicada en el km 2 de la carretera de Chamartín de la Rosa. También disponían de dos fábricas de resinas en Cuenca. 
 

Fábrica de Romero Girón en Chamartín de la Rosa. 
Fotografía: Posiblemente de Marín o Salazar (1916)
2021 Historia urbana de Madrid ISSN 2444-1325 

 
La familia estaba compuesta por Felipa López Pelegrín (viuda de Romero Girón), Patrocinio, Regina, Amadeo, Manuel y Vicente, hijos del jurista, político y periodista D. Vicente Romero Girón, muy activo en la escena política desde 1854 hasta 1890. 

Los hermanos ocupaban puestos importantes: Manuel había sido secretario del Congreso y después relacionado con el ministerio de Marina; Amadeo era ingeniero de caminos en la Compañía de los Ferrocarriles del Norte; Vicente, jurisconsulto, fue Diputado por Cuenca en la legislatura 1899-1900 y Senador por la misma provincia en las legislaturas 1918, 1919-1920, 1921-1922 y 1922. Las hermanas fallecieron en la primera década del siglo XX. 

El 23 de enero de 1900, Vicente había sido nombrado presidente del Consejo de administración de la constituida Compañía Ibérica de Resinas, dedicada a la fabricación de resinas, aguarrás y otros derivados del pino. La dirección industrial radicaba en Madrid y la comercial en Santander. 
Según una noticia de la revista Ferrocarriles, Industria y Comercio, en 1903 se produce la fusión con la Unión Resinera Española.

No cabe duda de que estos puestos favorecieron en parte el crecimiento de su actividad industrial y el éxito obtenido. Algunas noticias ratifican esta aseveración que no pretende ser capciosa. Así, en La Nación, del 5 de noviembre de 1925, se daba cuenta de lo dispuesto por el ministerio de Marina:
«Autoriza a D. Manuel Romero Girón para que acuda a los concursos que se celebren en los arsenales con la pintura para fondos de buques, llamada “Romero Girón”, por ser de producción nacional». 

Por su parte, en El Imparcial del 23 de septiembre de 1928 podemos leer que Vicente formaba parte de una Comisión, en cumplimiento de Real orden, para atender los asuntos del Consorcio resinero. 


 
La Droguería y Perfumería 
Una noticia de la época sitúa la droguería en la calle del Arco de Santa María, nombre que tenía la de Augusto Figueroa desde 1835 y hasta el 11 de marzo de 1904, fecha en que adquiere el nuevo nombre. Esto nos indica que al menos desde 1900 el local de la droguería perteneció a los Romero Girón para el negocio de resinas y derivados. 
Las oficinas de esta moderna industria estuvieron ubicadas en la calle Claudio Coello, 30 y 32; más tarde en Jorge Juan, 5, después en el principal de Recoletos, 2 (duplicado), mismo edificio donde tenía su casa D. Vicente Romero Girón y López Pelegrín. La citada Compañía Ibérica de Resinas tuvo su sede social en la misma de Jorge Juan, 5, y después en la calle Barquillo, 28 (domicilio de Manuel Romero Girón). 
 


 

La Correspondencia de España del 8 de noviembre de 1915, en su sección «Madrid-Industriales y Comerciantes prestigiosos», dedicaba un espacio a los situados en la calle Augusto Figueroa. De la droguería decía: 
[…] visitamos la casa núm. 15, despacho de venta de aguarrás, barnices, esmaltes, aceites, pinturas, preparados, etc., […] La casa Romero Girón, que tiene marca registrada para sus productos, y que a la vez es depositaria de la de Burrells y Compañía, de Londres, ha evolucionado tan felizmente, disipando los miles de inconvenientes que se presentaron para la fabricación de sus barnices, que hoy, como única en España, ha conquistado el más preeminente lugar entre las similares de Europa. 

 

Lo cierto es que la empresa había ampliado su mercado con la fabricación de una gran variedad de pinturas. Sus barnices de alto grado habían conseguido gran fama entre los pintores de coches con sus clases extra, superior y superior elástico, todos de gran durabilidad. A su vez, los pintores decoradores disponían de barniz extrafino brillante y la gama Flatting fino para exteriores, el superior para exteriores y pulimentar, y el normal para interiores. Además, fabricaban el blanco cristal extra superior, el negro de Japón, el negro elástico para hierro y pinturas para barcos. Todo esto sin abandonar la fabricación de sus primitivos productos resinosos, como aguarrás, colofonias, pinturas esmaltadas, barnices de copal, holandés de resina y secantes líquidos. 

Lo de los barnices “Flatting” y demás no era cosa nueva. En 1870 se comercializaban los de la firma NOBLES Y HOARE, de Londres, a través de su distribuidor Enrique Steinfeldt de la calle del Prado, 19. Los depósitos estaban en Alicante, Bilbao y Sevilla. 

No dejaremos en el tintero a los otros comercios visitados en la calle Augusto Figueroa, cuya presencia en la villa y corte también puede estar sujeta a investigación. En la citada sección de La Correspondencia de España nombraban a los Almacenes de comestibles de D. Antonio Gil Sabadia, en el número 34, con sucursal en Libertad, 18. 

En el número 35 se situaba uno de los depósitos de jabón y aceite fabricados por la razón social Hijos de José del Acebo y Compañía, bajo la denominación de “La Magnolia”. Tenía su sede social en la calle Marqués de Santa Ana, 17; el otro depósito estaba en la corredera Baja de San Pablo, 57, primitivo emplazamiento, tal y como lo indica la siguiente publicidad de 1875.


Otro negocio de aceites estaba en el número 43; se trataba del depósito de aceites andaluces marca “San Rafael”, del señor Muñoz de la Torre, cosechero en Martos (Jaén). 

En el número 29 estaban “Los Ceas”, Almacén de Coloniales, famosos por la elaboración del chocolate a brazo y en el número 28 la Droguería y Perfumería “La Universal”, de D. Antonio Moreno. 

En el número 19, haciendo esquina con la calle de Hortaleza, estaba ubicado el Almacén de tejidos de Policarpo Ruiz. Antes había estado en la calle Jacometrezo, 15, pero su traslado fue debido a los derribos que darían paso a la Gran Vía. 

Una joyita de la publicidad nos indica que en el número 47 estaba el despacho de P. Estapié y Compañía, constructores de toldos, tiendas de campaña y todo tipo de objetos de lona y loneta. 


 
Continuamos...
La marca registrada “ROMERO GIRÓN” estuvo presente en obras particulares y del Estado. Suministraban sus productos a las Compañías Transatlánticas y de los Ferrocarriles de M.Z.A., a la Sociedad Española de Construcción Naval, Compañía Auxiliar de Ferrocarriles, Anónima de Buitrón y otras muchas. 

Además, fue una de las industrias y comercios que participaron en las obras del Metropolitano, figurando en la extensa lista publicada por la Correspondencia de España con motivo de la inauguración de la línea Cuatro Caminos-Puerta del Sol en 1915. 


 
También serán proveedores para las obras del Hotel Ritz y del nuevo edificio de la revista Estampa, inaugurado en 1930 en el Paseo de San Vicente, 16 y 18. 
 
 
Esta publicidad de 1935 nos indica que existió una fusión, pasando a denominarse BARNICES CLAESSENS Y ROMERO GIRÓN, S. A. ESPAÑOLA, con domicilio en la calle Génova, 2. 
 

Una convocatoria de Junta general ordinaria publicado en el BOE de 30 de marzo de 1961, sitúa a esta sociedad con domicilio en la calle Romero Girón, 3; idéntico al de otra sociedad, la SOCIEDAD ANÓNIMA MAS. La calle Romero Girón figura oficialmente dada de alta en el callejero madrileño el 1º de enero de 1964. 
 
El Boletín Oficial de la Provincia de Madrid del 6 de agosto de 1977, apunta lo siguiente en la sección de Hacienda y Economía: 
«Expediente 1.928/77, procedente de la Delegación de Hacienda de Madrid, por liquidación de oficio, correspondiente a "Barnices Claessens y Romero Girón, Sociedad Anónima “, Impuesto sobre Sociedades, Ejercicio 1969. Base imponible que el Jurado acuerda: Noventa y nueve mil pesetas (99.000 pesetas)».
 
Y hasta aquí llega este trabajo, con la intención y esperanza de que los curiosos y avezados investigadores sumen datos que puedan enriquecer aún más la historia de la Droguería Romero Girón. Espacio fotografiado por Otto Wunderlich entre 1920 y 1922, e identificada su ubicación en agosto de 2021. 
 
Cien años han pasado y la trapera, con su burro y sus miserias, allí sigue. Ya sabemos dónde, gracias a la curiosidad de Félix Calle, la investigación de Miguel Chacón y las aportaciones de Alejandro Amador Hernández. 
 

 
 
Dedicado a los miembros y administradores del grupo de Facebook Historias Matritenses.
 

 
Bibliografía y Cibergrafía
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© 2021 Eduardo Valero García - HUM 021-005 ROMERO GIRÓN
Historia Urbana de Madrid
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domingo, 22 de agosto de 2021

Electricidad y lámparas en la visera de la Puerta del Sol.

En el primero de los artículos dedicados a la visera de la Puerta del Sol hicimos referencia al estanco de D. Ángel Herrero, conocido como “el permanente de la visera” por estar abierto las 24 horas. Durante los habituales apagones de las farolas que iluminaban la plaza, la luz del estanco se reflejaba en la amplia acera ofreciendo un aspecto fantástico. Antes de aquello, la Historia de la electricidad en Madrid estuvo plagada de fracasos y aciertos, conviviendo la iluminación a gas con la eléctrica hasta bien entrado el siglo XX.
 
Hablar de la electricidad, ahora que se ha incrementado su precio, aviva nuestros más oscuros instintos; sin embargo, intentaré haceros placentera la lectura con el recuerdo de las lámparas “METAL” que iluminaron los hogares madrileños y españoles desde la visera de la Puerta del Sol. 
 
 
La fotografía, tomada desde la calle de Alcalá, nos muestra el intenso tráfico rodado de esa arteria y la plaza en la década de los 60 del siglo pasado. Además de los automóviles, los autobuses y los transeúntes, podemos ver la fisonomía de la Puerta del Sol y el luminoso de Domecq sobre el edificio de La Mallorquina; también el cartel del Hotel de París, y debajo de este el de las lámparas “METAL-MAZDA”. Para completar la estampa madrileña sólo nos faltaría ver el camión que distribuía las indispensables bombillas. 
 

Cortesía de Scalemates, base de datos de modelos a escala. https://www.scalemates.com/es/kits/modeltrans-218-ebro-b-35-lampara-metal-mazda--1104914
 

El establecimiento comercial de la Compañía General Española de Electricidad S.A., fabricante de estas lámparas de filamento metálico, estaba ubicada en la Puerta del Sol, 1 y calle de Alcalá, 2, en plena visera y frente a la plaza, símbolo de los avances del alumbrado público y privado. 

Si en 1831 se habían realizados las primeras pruebas de iluminación a gas en los jardines del Café de la Victoria (más conocido como de Lorencini) y se colocaban 24 faroles de gran tamaño en la Puerta del Sol, el 24 de enero de 1878 el Ayuntamiento inauguraba dos candelabros con tres globos de vidrio; en su interior arcos voltaicos generados por dínamos cuya maquinaria de vapor estaba en los sótanos del Ministerio de la Gobernación. 
 
Dos grabados de Pellicer, publicados en La Ilustración Española y Americana de enero y abril de 1878, retratan la plaza con sus dos enormes farolas.
 


 
Durante las ferias de mayo de ese año se iluminará el Salón del Prado. Así lo describía La Ilustración Española y Americana
«Cerca de la fuente de Apolo, y sobre un tablado de doce metros de alto, que figura al exterior una estrecha torrecilla para telégrafo óptico, brillaban dos focos de luz eléctrica, cuya viva claridad se extendía hasta el Paseo de Recoletos, por un lado, y el Jardín Botánico por otro, iluminando el prolongado Real de la Feria.» 

 


Hubo antes y después muchas conmemoraciones y eventos con la luz y la plaza como protagonistas. En 1875, con motivo de la entrada de Alfonso XII, se colocó un faro en la torre del reloj del Ministerio de la Gobernación «que dirigía vivísimos rayos al surtidor de la Puerta del Sol.» 

 

La fábrica de lámparas
Volviendo a las lámparas METAL de la Compañía General Española de Electricidad S.A., cabe destacar la fábrica, primera de este ramo fundada en España e instalada desde 1894 en la calle Arregui y Aruej del barrio de Las Adelfas (Pacífico), donde también estaba su domicilio social. El edificio había sido arrendado a la Compagnie Générale d’Electricité, de París, fundadora de la fábrica de lámparas incandescentes en Madrid y proveedora de la Casa Real. En 1907 trabajaban en la fábrica unos 200 empleados que producían 5000 bombillas diarias.



 
 
La Compañía General Española de Electricidad S.A. había sido constituida en 1910 por Ubaldo Castells y Cantó, Eugenio Arizmendi y Echeverría, Máximo Azoaga y Sorrón y José Miguel Zuviria y Legorburu, con un capital de 100 000 pesetas. Fue nombrado director gerente el señor Francisco Brandón Uste. 

En 1914, y a pesar de los inconvenientes en el suministro de material que representó la Guerra Mundial, la producción de 5000 bombillas diarias se incrementó con la contratación de 300 empleados más. 


Las mujeres en la fábrica y en la publicidad
En 1916 llegó a contar con 600 empleados, casi todos provenientes del Puente de Vallecas y de la barriada de Doña Carlota. En su mayoría eran mujeres, por ser las más cualificadas para la confección de las lámparas. La fábrica disponía de cocina, comedor y sala de lactancia para uso de sus empleadas.

Las siguientes fotografías de Salazar, publicadas en la revista La Esfera de 1916, nos muestran el proceso de fabricación realizado íntegramente por mujeres. 




La presencia del sexo femenino quedaba representada en la publicidad de sus productos y también en los conflictos laborales, porque estas mujeres fueron tan reivindicativas como las cigarreras de la fábrica de tabaco de Embajadores. Además, un eslogan de los años 50 indicaba que la lámpara METAL era "la novia del Sol". También es cierto que en aquellos tiempos se decía que "consumían menos que una mujer". En fin, volvamos a los años de esplendor disfrutando de estos anuncios.

 
El anuncio que más tiempo se mantuvo en las páginas de revistas fue el que vemos a continuación, al menos desde 1922 y hasta 1927. En la firma aparece POVO, posiblemente el artista valenciano Francisco Povo, conocido por su arte en la decoración de abanicos y muy de moda en aquellos años.
 
 
Los primeros anuncios que hemos visto eran encargados en su mayoría a la Agencia HELIOS A.G. de Barcelona. A partir de 1928 la estética de los anuncios cambió radicalmente, ajustándose al estilo del momento. Será la Agencia LOS TIROLESES, de la calle Romanones, 7 y 9, la que se haga cargo de la cuenta. 

 
Luego llegarán otras agencias, otros creativos y nuevas modas. A partir de la década de los 30 la Agencia ALAS diseñará los anuncios de la Compañía.
 
 
En 1948, el famoso dibujante publicitario Julio Ferrer Sama será designado director artístico de ALAS. ¿Os acordáis de aquello de "la novia del Sol"? Pues bien, viene de la creatividad de Ferrer Sama.



 
Lámparas A.E.G., EGMAR, METAL y MAZDA 
En la fábrica de Pacífico se confeccionaban las lámparas de las marcas “Metal T”, de filamento metálico, y “Metal ½ watt”, de nitrógeno; ambas muy utilizadas en comercios y casas particulares; además, eran suministradas a grandes empresas de Electricidad, de Coches cama y Tranvías, principalmente para la Sociedad de Tranvías de Madrid, que llevaba estas lámparas en todos sus coches. Con el tiempo fueron sumando productos, como las lámparas para automóviles “METAL-AUTO”, las válvulas de recepción y emisión para radiotelegrafía “METAL-RADIO” y hasta unas que ayuntaban mosquitos, la “METAL-PARINSECT”. 

Anuncio publicado en la revista Madrid Científico. Año 1911
 
Los avances tecnológicos los llevarán a fabricar nuevos modelos de válvulas y lámparas, como las “monowaticas”, las de gas Argón con filamento de doble espiral, las “Opales” y las de luz día, entre otras. Sus potentes lámparas halógenas iluminaron varios estadios de futbol. También comercializaron radiadores eléctricos y proyectores dióptricos, estos últimos dedicados a la navegación aérea. La Sociedad fue concesionaria de las patentes y métodos de fabricación de las compañías General Electric, Thomson Houston y Générale d’Electricité.
En 1955 participa en la Primera Exposición Nacional de la Moto y la Bicicleta, celebrada en el Parque de El Retiro. El stand ofrecía productos para automóviles, motocicletas y velomotores de su marca “METAL-AUTO”. 
 

En la convención celebrada en 1978 en Burgos, la empresa presentaba una nueva gama de luminarias múltiples. En aquella ocasión se proyectó «La nueva luz de España», especie de documental promocional de sus productos y avances tecnológicos. 

 

Si bien desconocemos el momento exacto en que la Compañía comienza a producir las bombillas MAZDA, sí podemos decir que desde 1910  fueron fabricadas por la Thomson Houston Ibérica S.A., primero con la denominación "Lámparas A.E.G." y desde 1912 como “Lámparas EGMAR” en España y Portugal (MAZDA en Estados Unidos), bajo licencia de la A.E.G. Los establecimientos comerciales de la Thomson Houston Ibérica S.A. estaban en la calle del Prado, 20 y Salón del Prado, 14.

En 1911 la A.E.G. compra los talleres de la Felten & Guilleaume Lhameyer Werke, de Frankfurt, y absorbe a la reputada Casa Juan Wenzel & Cía., representante en España de los citados talleres. La Casa Wenzel tenía sus oficinas en la Carrera de San Jerónimo, 28. Hasta 1899 habían estado instaladas en la calle Carretas, 37.


Publicidad de 1913

Publicidad de 1905

Posteriormente, y por breve espacio de tiempo, serán fabricadas con misma licencia por la Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas S.A. La SICE, establecida en 1921, tenía su fábrica en la Carretera de Chamartín, 11. Sus oficinas estuvieron en la calle Barquillo, 1 y 19, donde instalaron su elegante tienda; más tarde la trasladarán a su centro de exposición de Eduardo Dato, 9. 

 

Publicidad de 1923
 

Modernización y conflictos laborales
En 1973 la Compañía General Española de Electricidad inauguraba el nuevo edificio de su sede social y fábrica en la Autopista Aeropuerto de Barajas, km. 13. 

Antes y después, las huelgas y encierros de sus trabajadores fueron frecuentes, aunque no exclusivos; los empleados de otras empresas como «Isodel» y «Standart» se unieron en 1967 a las protestas de las 500 empleadas de fábrica Metal-Mazda en la manifestación de la zona Legazpi-Atocha-Pacífico. Fábricas de diversos ramos, escuelas e institutos, trabajadores del teatro y del cine, funcionarios y muchos comercios se sumaron a la huelga de 1976, contabilizándose 340.000 huelguistas. 

En diciembre de 1975 y hasta enero del año siguiente, la fábrica “METAL-MAZDA”, que contaba entonces con una plantilla de 1200 trabajadores, había cerrado sus puertas tras la aprobación de un expediente de regulación de empleo. Reabierta en enero de 1976, como hemos dicho, fue cerrada nuevamente y desalojados sus empleados, quienes se recluyeron en la iglesia de San Timoteo en Vallecas. 

En noviembre de 1983 alrededor de 400 empleados se encerraron como protesta por la aprobación de 92 despidos por la Dirección General de Trabajo. Ese año la empresa tenía 1100 trabajadores repartidos en Madrid, el mayor volumen en Barajas (producción) y el resto en siete centros comerciales. 

Una noticia de ABC del 20 de noviembre de 1981 hablaba de la puesta en marcha de la nacionalización de empresas francesas, entre ellas se encontraba la Compañía General Española de Electricidad S.A., que había sido arrendataria de la Compagnie Générale d’Electricité, de París, desde su fundación en 1910, y en el año de la noticia lo era de Thomson-Brandt. 

En 1982, en su condición de primera empresa fabricante de lámparas para automóvil en España, sacaba al mercado un nuevo estuche confeccionado en plástico antichoque con repuestos de lámparas principales y auxiliares, además de recambio de fusibles, un destornillador y una gamuza.

Publicidad de 1982

El Diario de Burgos del 24 de febrero de 1983, en una noticia relacionada con las actuaciones del Tribunal de Defensa de la Competencia, indicaba que la dominante empresa Philips había absorbido a Metal-Mazda, haciéndose así con el control del mercado español de lámparas y aparatos eléctricos. 

Antes de finalizar este título que habla de trabajadores, recordemos al equipo de futbol de la fábrica METAL-MAZDA, retratados el 1º de mayo de 1967. 
Actualmente depositada en el Archivo Regional de la Comunidad de Madrid bajo la signatura OLRO0003_000001.JPG, la fotografía es propiedad de doña Olga Rodríguez Gambarte. Se utiliza en este artículo de investigación sin fines de lucro.


Recordemos también que existió el equipo METAL-MAZDA de Gimnasia femenina. 
 
 
Fin de la historia, con demolición
En 1988, después de 15 años abandonada, la fábrica fue ocupada por unos cien jóvenes; esto ocurrió el 20 de mayo. El grupo de okupas convirtieron el vetusto edificio en una “Kasa Popular” -así denominada- en la que se desarrollaban actividades culturales. Disponía de librería, taller de cuero, serigrafía, y comedor popular. 
La vieja fábrica, propiedad de la empresa constructora Edificaciones Cimer S.A., iba a ser demolida. No se trataba de meras especulaciones, el Ayuntamiento de Madrid había concedido la licencia de obras para el derribo. Más abajo encontraréis una serie de vídeos que recuerdan los hechos [1]
 
Y así ocurrió, la mañana del 30 de agosto fuerzas policiales desalojaron a las veinte personas que ocupaban el edificio en ese momento; a continuación, dos plumas de demolición comenzaron con el derribo de la primera fábrica de lámparas de Madrid. Casi cien años de historia quedaban reducidos a escombros. 

Fotograma del documental Arregui y Aruej: Cien días de okupación.
 
El Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) del 15 de enero de 1998, anunciaba la disolución de la Sociedad anónima Compañía General Española de Electricidad. 

Esta ha sido una historia más de las que nos ofrece la visera de la Puerta del Sol.  

 

En memoria de mi padre, José Valero Hernández, 
excelente reparador de radios de válvulas y un gran maestro de la electricidad.

Eduardo Valero García
 
 


 
Bibliografía y Cibergrafía
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[1] Documental Arregui y Aruej: Cien días de okupación. Producciones Fendetesta. Madrid, 1991.
PARTES 1 - 2 - 3

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