Cien años atrás, el 26 de enero de 1916, el presidente del Consejo de ministros, Sr. conde de Romanones, había propuesto a la Junta del Centenario suspender las celebraciones hasta que terminase la guerra europea. Lo que no había aclarado es que con fecha 23 de enero había enviado al rey la propuesta.
Para Romanones y su Gobierno era "imposible moralmente celebrar en abril de 1916 el grande y debido homenaje a Cervantes...". Decía también que cualquier celebración sería "indigno de España", porque se ofrecería "un espectáculo extraño y lastimoso de un pueblo entregado a fiestas" mientras en Europa "los hombres se matan a centenares de miles...". [1]
Alfonso XIII, de viaje por Granada, tuvo a bien firmar un Real decreto el día 30 de enero. Lo publicaba la Gaceta el último día del mes:
Para Romanones y su Gobierno era "imposible moralmente celebrar en abril de 1916 el grande y debido homenaje a Cervantes...". Decía también que cualquier celebración sería "indigno de España", porque se ofrecería "un espectáculo extraño y lastimoso de un pueblo entregado a fiestas" mientras en Europa "los hombres se matan a centenares de miles...". [1]
Alfonso XIII, de viaje por Granada, tuvo a bien firmar un Real decreto el día 30 de enero. Lo publicaba la Gaceta el último día del mes:
Se cumplía el tercer aniversario de la muerte de don Miguel (22 de abril de 1616), y cien años desde la anterior celebración. A poco más de tres meses de rendirle homenaje, el conde va y quiere suspenderlo; el rey, para no ser menos, lo ratifica por el Real decreto que acaban de leer.
Como es lógico, las críticas no tardaron en llegar.
"El Centenario en silencio"
El Imparcial publica una extensa columna titulada "El Centenario en silencio", que firma D. Mariano de Cávia. El periodista arremete con sutileza y mano izquierda, pero arremete.
Y eso es sólo el comienzo. Unos párrafos más abajo, después de ironizar con ciertos aspectos de la guerra, Cávia clava su pluma en la aristocrática sesera de Romanones.
A estas alturas uno se pregunta si la gran cruz de la Orden civil de Alfonso XII se la querían imponer para cerrarle la boca o por sus verdaderos méritos. Porque, lejos de dejar el tema en este punto, Cávia continúa su artículo con estos párrafos tan actuales:
Por fin, para sosiego de los que salieron peor parados en aquellas palabras, el periodista finaliza con estas otras:
La franqueza de Pérez Zúñiga
Don Juan Pérez Zúñiga era otra de las estrellas que, como Antonio Casero, llenaban de graciosas coplas las páginas del Heraldo de Madrid. Muy jocosas y ocurrentes, sí, pero con el mazo dando.
Y acabó enero
Así acababa el mes de enero, con este bombazo de noticia que echaba por los suelos la memoria de tan ilustre hombre de la literatura.
En el camino han quedado algunas noticias sobre la mendicidad, el pan, los carbones, y otros tantos asuntos que mantenía en vilo a la clase obrera y al ciudadano madrileño en general. Unas y otras cosas seguirán presente en nuevos meses, porque esto no termina aquí.
Como es lógico, las críticas no tardaron en llegar.
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| Dibujo de Tovar HERALDO DE MADRID, 1916 © BNE-HD Archivo HUM © 2016 Eduardo Valero García-HUM 016-014 EFEMERIDES 1916 © 2016 Historia Urbana de Madrid ISSN 2444-1325 |
"El Centenario en silencio"
El Imparcial publica una extensa columna titulada "El Centenario en silencio", que firma D. Mariano de Cávia. El periodista arremete con sutileza y mano izquierda, pero arremete.
Y eso es sólo el comienzo. Unos párrafos más abajo, después de ironizar con ciertos aspectos de la guerra, Cávia clava su pluma en la aristocrática sesera de Romanones.
A estas alturas uno se pregunta si la gran cruz de la Orden civil de Alfonso XII se la querían imponer para cerrarle la boca o por sus verdaderos méritos. Porque, lejos de dejar el tema en este punto, Cávia continúa su artículo con estos párrafos tan actuales:
Por fin, para sosiego de los que salieron peor parados en aquellas palabras, el periodista finaliza con estas otras:
La franqueza de Pérez Zúñiga
Don Juan Pérez Zúñiga era otra de las estrellas que, como Antonio Casero, llenaban de graciosas coplas las páginas del Heraldo de Madrid. Muy jocosas y ocurrentes, sí, pero con el mazo dando.
Y acabó enero
Así acababa el mes de enero, con este bombazo de noticia que echaba por los suelos la memoria de tan ilustre hombre de la literatura.
En el camino han quedado algunas noticias sobre la mendicidad, el pan, los carbones, y otros tantos asuntos que mantenía en vilo a la clase obrera y al ciudadano madrileño en general. Unas y otras cosas seguirán presente en nuevos meses, porque esto no termina aquí.
Bibliografía | ||||||
[1] Entrecomillado: fragmentos del proyecto de decreto redactado por Romanones y enviado al rey Alfonso XIII el 23 de enero de 1916. Todo el contenido de la publicación está basado en información de prensa de la época y documentos de propiedad del autor-editor. En todos los casos cítese la fuente: Valero García, E. (2016) "Centenario de Cervantes postergado. Enero de 1916.", en http://historia-urbana-madrid.blogspot.com.es/ ISSN 2444-1325 • Citas de noticias de periódicos y otras obras, en la publicación. • En todas las citas se ha conservado la ortografía original. |
© 2016 Eduardo Valero García - HUM 016-014 EFEMERIDES 1916
ISSN 2444-1325
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